En los recuerdos del ángel se entremezclan su pasado de mortal con las experiencias que vivió al principio de su transformación.
Una imagen persiste, el paisaje desde la torre de un castillo.
Una ceremonia prohibida que le convirtió en lo que hoy es.
¿Lo imaginó, o es real? Ha pasado demasiado tiempo para saberlo. Las criaturas que la rodean no pueden explicarle, ellas siempre han estado muertas.
Y los árboles confunden la memoria de las estaciones.
Además, poco importa. El presente es infinito y está lleno de nueva aventuras.
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